Amenazas falsas, correos en cadena y rumores
Los rumores y amenazas falsas son muy habituales en Internet y, sobre todo, a través del correo electrónico. Algunas tienen un fin humorístico pero no podemos dejar de ser cautos, ya que muchas tienen como objetivo fines maliciosos, intentos de fraude o recopilar direcciones de correo-e para enviar correo no deseado (spam).
Hay infinitos ejemplos de correos en cadena que tienen que ver con amenazas falsas, falsas noticias, correos de alerta avalados por supuesto expertos y todo tipo de notificaciones que una persona puede leer.
Uno de los ejemplos más típicos y conocidos por la comunidad de seguridad internacional es el del “niño enfermo”. No conocemos el origen concreto, pero en la época de las BBS (sistemas de comunicación que se utilizaban antes de la popularización de Internet), ya existían multitud de casos de “niños enfermos” que lo único que pedían era que se les mandara un mensaje o correo de ánimo, o con una foto de nuestra ciudad, etc.
De esta manera, los spammers (término con el que se conoce a los que envían correo no deseado) que se encontraban tras esa petición, podían recabar direcciones de correo e incluso, podían crear categorías por zonas geográficas y ciudades.
Todos estos mensajes y peticiones han ido evolucionando y, aunque se mantiene la misma idea de base, transmitir una necesidad o alerta que debe ser respondida con un correo, han ido desarrollando aspectos curiosos: correos con alertas sobre graves problemas de seguridad que tenemos que reenviar a diez personas o…, correos de “niño enfermo”, correos sobre premios que ganaremos enviando cientos de correos (nunca indican dónde se hará entrega del premio), correos sobre nuevos radares de tráfico…
La mejor recomendación que podemos dar es la de evitar estos correos. No prestemos ninguna atención ya que, si son noticias o alertas legítimas, las recibiremos por otros canales con un origen verificable (prensa, amigos…).
Por otro lado, es buena idea contactar con el origen de ese tipo de correos para indicarle que no debe reenviarlos o poner su dirección de correo en copia, ya que son objeto de recibir correo no deseado (spam). Y desde luego, nunca respondamos, reenviemos o insertemos nuestra dirección de correo en estas cadenas de mensajes o alertas.